Una vez llegamos a la primera rotonda de Campo, nos desviamos hacía las Vilas del Turbón y aparcamos justo encima de la embotelladora, donde empieza la ruta.
Al principio vas por una pista bastante fácil de llevar, hasta que llegas a una intersección, puedes elegir por dónde quieres subir al Trubón. Nosotros elegimos el camino de la izquierda y seguimos un poco más por la pista.
Al rato puedes seguir por esta pista o desviarte por un bosque, nosotros eso hicimos y la verdad que la ruta se volvió más agradable, la sombra se agradecida y siempre es mejor caminar entre la naturaleza.
¿Qué te ha parecido?