Hoy el día ha empezado muy pronto, a las 4 de la mañana nada más y nada menos, toca viaje corto, Agra y Jaipur.
Agra y sus monumentos transmiten cosas que no me esperaba.
Eran las 5 de la mañana aunque más tranquilo que en pleno día, seguía habiendo miles de personas por la calle. Una de las cosas que me sigue alucinando es los miles y miles de Rickshaw que hay en esta ciudad, y en este trayecto de 30 min he podido comprobar que la mayoría de los conductores de estos, duermen en el mismo Rickshaw, lo que me hace preguntar si estas personas tienen familia, han elegido ese trabajo y forma de vida «solitaria», o Nueva Delhi es tan grande que a veces no les vale la pena volver a casa a dormir, no lo se, si puedo me enteraré porque me tienen intrigada
Llegamos a Agra, de repente todo cambia, sigue existiendo pobreza pero no es el caos de Delhi. De repente el Taj Mahal enfrente, alucinante, sin palabras, pero con un significado muy diferente al de ayer, hemos visto miles de fotos, pero tenerlo delante es una sensación que aunque suene mal se te hace olvidar que estas en la India que llevas 4 días conociendo. Ese trozo de mármol te invade y yo me podría quedar mirandolo horas, no se, transmite paz, relax, desconexión quizás venga descolocada del barullo y el ruido de Delhi y aquí al haber más paz ( aunque sigue todo igual en menos cantidad) transmite cosas que tu mente necesita. Cuando te cuentan la historia de como se hizo y los materiales que han usado todo te parece bien, pero hemos tenido la suerte de conocer a unos verdaderos profesionales que bajo mi punto de vista si en vez de vivir en la India, fueran europeos se pasearían con coches caros por la calle, porque su trabajo no tiene precio, esculpen el mármol, tallan las piedras preciosas y les van dando forma, todo artesanalmente, ya sea grande o pequeño, parece una tontería pero lo ves y alucinas.
Sigo quedandome sin palabras cuando lo vuelvo a ver
Las sensaciones de hoy, no tienen nada que ver con las de ayer, quizá sea por el cambio de aires, porque acabar el día en una piscina con el agua a 36 grados relaja, o por que realmente Agra y sus monumentos transmiten cosas que no me esperaba. Hoy he conocido otro tipo de India, esa que no huele tanto a curry y humedad junto, esa que no hay tanto ruido ni caos, esa que quizás se pueda apreciar más las tradiciones indias y lo bonito que esta ofrece, sin dejar de sentir el calor húmedo que parece que te derrites, pero esto último va de serie en este viaje.
¿Qué te ha parecido?